Seguiré soñando, escribiendo y existiendo.

Tenía apenas ¿qué? 15 años cuando empecé a escribir a dejar que mi pluma transformase mis sueños en letras y siempre se me hizo fácil poder expresar lo que me alma gritaba por dentro. Muchos de mis amigos bloggeros no conocen mi vida pasada al igual que no conocen que para mi mis letras fueron la única terapia para mi sufrimientos y mis desilusiones. Las letras para mi han sido como un rio donde a veces solo yo navego. Y por muchas cosas o por muchos comentarios de aquellos que alguna vez me expresaron querer lo mejor para mi, pero que igual siempre consideraron mi loca pasión por escribir “puras mamadas cursis” me acuerdo una vez escuchar a al quien que pensé querer mucho decir “? mmm si muchas gracias pero este no soy mucho para poemas debe de ser bonito verdad?” y esa persona ni siquiera se molesto en leer el papelito arrogado que le había entregado. Pero por esas razones o más hoy en mis 21 años cansada de escuchar lo mismo, había pensando entregar la toalla y decirle adiós a algo que por muchos años fue parte de mí. Algo que a través de ellas pudo conocer gente maravillosa como un hombre (me limito a decir su nombre por respeto a el) que igual me dejo ser parte de sus sueños y de su corazón que gracias a el entregue todo mi amor y mi corazón en mis letras para hacerle saber cuándo grande era mi amor por él. Y aunque las cosas llegaron a su fin esos recuerdos traen lágrimas e igual alegría porque gracias a sus letras aprendí lo que era escribir con el corazón pero aun mas entendí que unas solas palabras podrían dar vida a tus imaginaciones y a tus sueños. Igual así también conocí a otro hombre llamado ¡Sensei! que a través de sus letras puede escuchar la voz del pueblo Mexicano, las voz guerrera, las voz de aquellos los de abajo. E igual en ellas aprendí a vivir a, crecer y a veces fueron mi consuelo en esos momentos donde pensé no poder seguir con lo que ese tiempo me destrozaba. Y en este día sentaba frente esta magnifico aparato que acido el único testigo de mis lagrimas y mis risas al sentarme aquí y empezar siempre un nuevo escrito puedo decir que tendría que estar severamente cuerda para decidir o mejor dicho dejar morir mis sueños o aun yo misma con querer abstenerme a escribir. Pues fuera como negarme el derecho a vivir y negar que otros vivieran conmigo mis sueños, mis pasiones y mis dolores. Así hoy puedo decir que seguiré viviendo, seguiré escribiendo porque mis letras son mi existencia.

Francamente:
Rose un sueño escrito y la musa de tus sueños

P.D ojala y me siguán en este viaje en el mundo de las letras